Hacer que el dinero trabaje para uno
Dicen que el dinero habla. Y Alecta, con una cartera de activos valuada en 87 000 millones de euros, puede hablar alto y claro. Magnus Billing, su director ejecutivo, se propone utilizar la voz de la compañía para fomentar la sostenibilidad financiera.
Alecta fue fundada en 1917, fruto de un deseo compartido por empresarios suecos y sus empleados de ofrecer más seguridad a más personas durante la jubilación. El objetivo fue brindar una pensión que siguiera al empleado a lo largo de su vida laboral, incluso si cambiaba de empleador.
Hoy, Alecta gestiona planes de pensiones de empleo para 2,4 millones de personas y 34 000 empresas en toda Suecia. Pertenece a sus clientes, y sus activos gestionados suman 87 000 millones de euros. Es uno de los mayores accionistas de la Bolsa de valores de Estocolmo y el quinto proveedor más importante de pensiones de empleo de Europa.
Magnus Billing se incorporó a Alecta como director ejecutivo en 2016, tras ocupar el mismo cargo en la Bolsa de valores Nasdaq Stockholm y Nasdaq Nordics Ltd. Aportó a Alecta un sólido conocimiento de los mercados financieros, basado en tecnología, una red extensa de contactos y la capacidad de conciliar varios grupos de interés.
“Alecta es una parte importante de la sociedad sueca y, desde hace 100 años, desempeña un papel esencial para garantizar la libertad y la seguridad económicas de muchos suecos”, afirma Billing. “Lo que me inspiró fue la oportunidad de llevar esta obra hacia el futuro”.
La función prioritaria de Alecta, y de Billing, es maximizar el valor de las pensiones de empleo gestionadas por la empresa. En otras palabras: obtener el mayor valor posible de cada corona sueca aportada a los distintos planes de pensiones. La sostenibilidad también forma parte íntegra de la misión de Alecta.
Magnus Billing
Edad: 50
Familia: Esposa e hija
Residencia: Bromma, cerca de Estocolmo, Suecia
Trabajo: Director ejecutivo de Alecta. Previamente, director ejecutivo de la Bolsa de valores Nasdaq Stockholm y Nasdaq Nordics Ltd.
Aficiones: Familia, amigos y golf (tiene cuatro de hándicap).
“Hemos visto que se trata de una cualidad importante para una gran mayoría de nuestros clientes y queremos influir en la capacidad de nuestro sector para adoptar una perspectiva a largo plazo y promover el desarrollo sostenible”, explica Billing, que no ve ninguna incompatibilidad entre impulsar el crecimiento de los fondos de pensiones y fomentar la sostenibilidad.
“Estamos convencidos de que las empresas que lideren el desarrollo sostenible también serán las que ofrezcan la mayor rentabilidad bursátil a largo plazo”, agrega. “Eso nos beneficia a todos. Y SKF tiene una presencia muy destacada en nuestra cartera por su apuesta decidida por la sostenibilidad”.
Alecta gestiona sus activos con personal propio, que trabaja con total independencia. Todas las inversiones se deciden tras un análisis exhaustivo, y la cartera de valores se limita a unas 100 empresas. Eso significa que, en muchos casos, Alecta es un accionista importante con capacidad para incidir en la orientación estratégica de la empresa participada. Esta influencia suele canalizarse a través de diálogos proactivos con su consejo de administración y su gerencia. Un ejemplo reciente fue el intercambio entre Alecta y Alphabet, la empresa matriz de Google y una de las cinco participaciones de mayor volumen de Alecta.
A principios de 2018, Google y YouTube, cuya propietaria es Google, fueron duramente criticadas por permitir la difusión de material antidemocrático y de extrema derecha a través de estos canales. En marzo de 2018, Alecta entabló un diálogo con Alphabet para saber cómo pensaba abordar el problema.
Estamos convencidos de que las empresas que lideren el desarrollo sostenible también serán las que ofrezcan la mayor rentabilidad bursátil a largo plazo.
“Tuvimos un diálogo fructífero con Alphabet, que nos facilitó información relevante, y nuestra impresión es que se toman estos problemas muy en serio”, dice Billing. “Constatamos que Alphabet está invirtiendo enormes sumas en inteligencia artificial, desarrollando algoritmos capaces de reconocer y señalar material inapropiado. Presentaron cifras según las cuales, durante el mes previo a nuestra reunión, el 98% del material señalado había sido eliminado. Evidentemente, seguiremos de cerca las acciones futuras de Alphabet en estos temas”.
Billing fue nombrado único miembro sueco del Grupo de Expertos de Alto Nivel sobre Finanzas Sostenibles (HLEG) de la Unión Europea. El grupo fue creado en diciembre de 2016 con la misión de elaborar propuestas para la estrategia de la UE para desarrollar un sistema financiero sostenible. Su presidente fue Christian Thimann, responsable de regulación, sostenibilidad y prospectiva del gigante francés de los seguros, AXA. Otros miembros fueron Pascal Canfin, director ejecutivo de WWF France, y Flavia Micilotta, directora ejecutiva de Eurosif, la organización paneuropea para la inversión sostenible y responsable.
“Es necesario mejorar las posibilidades de invertir en la transformación sostenible y contribuir a la inclusión de la sostenibilidad como factor en las decisiones financieras. Me siento muy orgulloso de haber tenido la oportunidad de aportar recomendaciones que se han plasmado en propuestas específicas y concretas para ello”, destaca Billing.
En septiembre de 2018, Billing fue nombrado presidente del consejo asesor del Centro de Finanzas Sostenibles de Estocolmo (Stockholm Sustainability Finance Centre), una iniciativa conjunta del gobierno sueco, el Instituto del Medioambiente de Estocolmo y la Facultad de Economía de Estocolmo. Su finalidad es acelerar y promover el cambio en las inversiones de capital, factor necesario para dar cumplimiento a los objetivos de desarrollo sostenible y climáticos fijados por las Naciones Unidas.
“El Centro reúne a una prestigiosa universidad dedicada a la investigación de los mercados financieros y la economía, el sector financiero y un instituto reconocido por su trabajo en temas de impacto medioambiental y desarrollo sostenible”, explica Billing. “Combinamos investigación, formación e innovación en los ámbitos de la sostenibilidad, la economía, las finanzas y las nuevas tecnologías. Nuestro objetivo es que Estocolmo se convierta en un centro internacional líder en este campo de investigación”.