Potencia eléctrica

Un pequeño fabricante de automóviles de Estados Unidos ha desarrollado un coche eléctrico cuyas prestaciones pueden igualar –o incluso superar– a la mayoría de los coches de gasolina.

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Un pequeño fabricante de automóviles de Estados Unidos ha desarrollado un coche eléctrico cuyas prestaciones pueden igualar –o incluso superar– a la mayoría de los coches de gasolina.

Industria

Durante un corto período a principios del siglo XX, los coches eléctricos llegaron a superar en ventas a sus competidores de gasolina. En aquel tiempo, coches como el Baker Electric, con una velocidad máxima de 35 km/h y una autonomía de unos 150 kilómetros, podían hacer frente a la competencia. Además, tenían la ventaja añadida de poder arrancarse desde el asiento del conductor, sin tener que bajar para accionar la manivela.

Pero pronto se vieron superados por el motor de combustión. Un factor importante fue la invención del motor de arranque, introducido en un modelo de 1913 de Cadillac, que permitía prescindir de la manivela. Otros factores decisivos fueron el bajo precio del combustible y la enorme ventaja en cuanto a autonomía y prestaciones. Al cabo de poco tiempo, los coches de gasolina dominaron la carretera y los coches eléctricos desaparecieron tras una nube de humos de escape.

Los coches eléctricos todavía están en la línea de salida. Hasta ahora, no se ha podido mejorar su punto más débil –las baterías– a un nivel que compita con las prestaciones y la autonomía de los coches de gasolina.

Pero un pequeño fabricante de EE. UU., Tesla Motors, una empresa creada en 2003 por ingenieros y empresarios de Silicon Valley, ha desarrollado un coche eléctrico capaz de igualar –o incluso superar– a la mayoría de los coches de gasolina.

El Tesla Roadster, cuyo nombre se debe a Nikola Tesla, inventor del motor eléctrico de corriente alterna, lleva un motor eléctrico de 185 kW (248 hp) que proporciona una velocidad máxima de 200 km/h y permite al coche alcanzar los 100 km/h en menos de 4 segundos. Esto significa que muchos Ferraris y Porsches se pueden quedar atrás cuando el semáforo se ponga en verde. La autonomía del vehículo es de 350 kilómetros por carga y la batería de ión-litio se puede cargar en tan sólo 3,5 horas.

Uno de los socios del proyecto de Tesla es SKF, que ha suministrado rodamientos sensorizados para las ruedas y rodamientos rígidos de bolas híbridos altamente especializados para el rotor principal del motor eléctrico.

Con un precio de 100 000 dólares, el Tesla Roadster sólo está al alcance de unos pocos privilegiados. Pero, en diciembre de 2008, ya se habían entregado Tesla Roadsters a más de 100 propietarios y otras 1200 personas lo han solicitado, así que el futuro pinta bien. Gracias a avances como éste, la posibilidad de un automóvil eléctrico competitivo y asequible está un poco más cerca.