Un maratón por la movilidad sostenible

 

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Resumen

El objetivo del Ecomaratón Shell es recorrer la mayor distancia posible usando la menor cantidad de energía. Su historia tiene origen en el laboratorio de investigación de Shell en Illinois, Estados Unidos, hace unos 50 años, cuando unos científicos hicieron apuestas amistosas para ver quién podía hacer más millas por galón en sus vehículos.
En 1985, se celebró en Francia el primer Ecomaratón Europeo Shell,
por lo que el de este año ha sido la 21ª edición. También se celebran Ecomaratones Shell en Inglaterra
y Escocia.
El Ecomaratón Europeo Shell está patrocinado por la Unión Europea.

 

Con los precios actuales de la gasolina, nada llama más la atención que ver
a gente joven probar ingeniosos modos de usar la menor cantidad posible.
El Ecomaratón de Shell es un foro para que los jóvenes hagan justamente eso.

Estudiantes de todoel mundo están diseñando y construyendo coches que pueden recorrer miles de kilómetros con un solo litro de gasolina. Y el lugar donde pueden exhibir su ingenio es el Ecomaratón Europeo Shell.

Este concurso anual permite a los estudiantes de ingeniería comprobar sus habilidades, y los vehículos ultraligeros y de bajo consumo que han diseñado, con las de otros jóvenes y sus máquinas. Es un proyecto educativo para promover los valores del desarrollo sostenible y la necesidad de proteger el medio ambiente. Además, motiva a los estudiantes de profesiones científicas y técnicas al introducir un elemento de competición en su trabajo a la vez que les proporciona mucha diversión.

El Ecomaratón Europeo Shell 2006, en el que compitieron unos 3.000 jóvenes de 256 instituciones docentes de 20 países, se celebró en el circuito de Nogaro, cerca de Pau, en el suroeste de Francia. Los pequeños coches aerodinámicos, en los que el conductor va tumbado sobre su espalda, deben cumplir las estrictas normas de Shell en cuanto a seguridad y otros factores. El coche de cada equipo debe dar siete vueltas al circuito de 3,6 kilómetros a una velocidad media de 30 kilómetros por hora. Los coches no compiten por ver quien llega antes. El objetivo es usar la menor cantidad de combustible –sea cual sea– en la distancia total de 25,2 kilómetros.

En el maratón de 2006 la mayoría de los coches utilizaron gasolina o diesel, pero también participaron coches que usaban otros combustibles: etanol y biodiesel (éster metílico de aceite de colza), hidrógeno, células energéticas y energía solar. El rendimiento de los coches que usaron combustibles alternativos se convirtió según una fórmula científica para que sus resultados pudiesen compararse con los de los coches de gasolina.

Participaron equipos de escuelas secundarias o técnicas, instituciones de educación superior y equipos independientes asociados a instituciones docentes. Un equipo del Instituto Federal Suizo de Tecnología (ETH Zürich) ostenta el récord absoluto de la carrera. En la competición de 2005, su vehículo de hidrógeno tuvo un consumo equivalente a 3.836 kilómetros por litro de gasolina (es decir, 0,026 litros cada 100 km). Ésa es aproximadamente la distancia entre Gibraltar y Moscú. Un coche de gasolina con este consumo usaría menos de cuatro litros para ir de París a Pekín.

 

El ganador de 2006fue el Lycée Technique La Joliverie de Nantes, en la costa atlántica francesa. El coche de etanol del Liceo lideró las clasificaciones con un consumo energético equivalente a 2.885 kilómetros por litro de gasolina. «No llegó a nuestra mejor marca en un Ecomaratón anterior: 3.410 kilómetros», explicaba un miembro del equipo, «que sigue siendo la marca récord para los vehículos de gasolina. Pero este año había fuertes vientos y las condiciones no eran favorables».

La competición de 2006 era el 21º Maratón Europeo Shell. En el primero, celebrado en Francia en 1985, participaron 20 equipos y la mejor marca fue de 680 kilómetros por litro de gasolina. El actual récord de 3.836 kilómetros es casi seis veces mejor. En 2006, participaron 256 equipos de 17 países europeos. También hubo equipos de Brasil, Arabia Saudita y Turquía. Francia fue el país con mayor número de participantes– 164 –, seguido de Portugal con 19, Bélgica con 11, España con 9 y Turquía con 8.

Además del premio al menor consumo de combustible, el Ecomaratón también concede premios especiales: un premio social/de hospitalidad, un premio de comunicaciones, un premio de diseño de SKF, un premio de ecodiseño, un premio de innovación técnica de Bosch y un premio de seguridad de Autosur.

Royal Dutch Shell, empresa angloholandesa con negocios en más de 135 países y más de 115.000 empleados, es conocida sobre todo por ser un proveedor líder de combustibles fósiles. No obstante, también ofrece a sus clientes una amplia gama de otras soluciones energéticas. Dos nuevas empresas de Shell, Shell Renewables y Shell Hydrogen, están creciendo
rápidamente y contribuyendo a hacer las fuentes de energía sostenibles y bajas en carbono más competitivas para su uso a gran escala.

Shell declara en un folleto informativo distribuido en la carrera de Nogaro que es muy consciente del desafío múltiple que plantean las crecientes necesidades de transporte, las decrecientes reservas petrolíferas y el cambio climático. Aunque las causas del cambio climático aún no están totalmente explicadas, los científicos saben que los gases invernadero producidos por el hombre, incluido el dióxido de carbono, desempeñan un papel en el proceso. Actualmente, el petróleo representa el 98% de todas las energías usadas para el transporte. El transporte representa la mitad del consumo total de petróleo y es responsable del 22% de las emisiones mundiales de CO2.

La Unión Europea presta su apoyo al Ecomaratón Europeo Shell. En su visita a Nogaro, el Comisario para la Energía Andris Piebalgs comentó: «La movilidad sostenible es una de las máximas prioridades de la Comisión Europea. Dado el carácter finito de muchos recursos energéticos, la movilidad sostenible significa usar los combustibles fósiles de forma más inteligente y desarrollar alternativas. Al patrocinar este evento, fomentamos la innovación para mejorar la eficiencia energética en el transporte y apoyamos los cambios conductuales para ahorrar energía. Pero estos esfuerzos no servirán de nada sin el compromiso de las personas claves y la participación de los jóvenes. Por eso la Comisión decidió patrocinar este evento, que representa una buena contribución a este esfuerzo conjunto».

 

Según Rob Routs,director ejecutivo, Downstream, de Royal Dutch Shell, el maratón se propone servir de inspiración: «Queremos inspirar a los futuros ingenieros y científicos dándoles una experiencia industrial práctica para resolver los problemas medioambientales. Además, queremos inspirar a todos los participantes, asistentes o lectores sobre estos temas a pensar más profundamente en nuestro impacto medioambiental y cómo podemos cambiar nuestro comportamiento para atenuar ese impacto».

El Ecomaratón Shell ofrece muchos beneficios secundarios. Los participantes aprenden a dirigir un proyecto de principio a fin, desde el diseño y la financiación hasta la construcción y la puesta a prueba de su trabajo en el circuito. Los estudiantes tienen la oportunidad de trabajar en todos los aspectos del proyecto y colaborar con colegas de otras disciplinas como las matemáticas, la física, la química, la informática, el dibujo técnico e incluso el marketing. Además, la búsqueda de socios técnicos y financieros ofrece una gran oportunidad a los jóvenes participantes de experimentar cómo funciona el mundo industrial y empresarial. Les permite establecer contactos con sectores que pueden serles muy útiles cuando entren en el mercado laboral.


Compromiso con la sostenibilidad

En años anteriores, SKF France se asoció con varios equipos en el Ecomaratón Shell. En 2006, la compañía dio un paso más allá al convertirse en uno de los patrocinadores oficiales del evento.

En una rueda de prensa informal previa al concurso, varios periodistas preguntaron por qué SKF estaba involucrada. Jean Tournoux, director general de SKF France, dio la respuesta. «SKF ha estado comprometida con la sostenibilidad durante muchos años», dijo a los periodistas. «Para nosotros, el desarrollo sostenible es una gran responsabilidad. Significa asegurar el éxito de nuestras operaciones ahora y en el futuro, y trabajar a fin de preservar los recursos para las futuras generaciones. Nuestra presencia en Nogaro es una prueba de este compromiso.

«Demuestra además la capacidad de SKF para centrar sus amplias capacidades en un proyecto complejo», continuó. «Y proporciona beneficios
a largo plazo, porque aquí podemos estrechar relaciones con escuelas de formación profesional y universidades, donde SKF buscará a sus futuros ingenieros y especialistas».

En el circuito de Nogaro había especialistas de SKF France que ofrecían consejos sobre cómo reducir la fricción de los rodamientos y mostraban a los participantes el mejor modo de instalar los rodamientos de bolas, cómo diseñar una disposición de rodamientos de bolas óptima y cómo optimizar el consumo de combustible en general.

Un ingeniero de SKF en Nogaro aportó este dato: si pudiésemos reducir la fricción en todos los rodamientos del mundo en tan sólo un 10%, dijo, ahorraríamos la energía equivalente a la de 18 centrales nucleares.