El nuevo tren de pasajeros ICE-4 se convertirá en la columna vertebral de la red de larga distancia de la Deutsche Bahn (Ferrocarriles de Alemania). El ICE-4, que circulará rutinariamente a 250 kilómetros por hora, se ha diseñado usando un concepto modular que permite reconfigurarlo para que se adapte a una amplia gama de aplicaciones diferentes en la red ferroviaria alemana.

Los bogies conducidos, suministrados por Bombardier, utilizan una disposición de rodamientos interior que reduce el peso y el consumo de energía. Para esa aplicación, SKF ha desarrollado una unidad especial de rodamientos de rodillos cónicos con sensores integrados para monitorear la velocidad y el sentido de giro de cada juego de ruedas. Al incorporar los sensores en la propia unidad de rodamientos, se reduce al mínimo el espacio necesario para todo el equipo, una importante característica en la configuración interior, donde el espacio es limitado.