Industria

La carrera más dura del mundo

Cada año, unos cuantos pilotos ponen a prueba sus vehículos, y a sí mismos, en una carrera de resistencia épica: el Rally Dakar.

Contenido relacionado

Datos

Apoyo ganador
SKF Sudáfrica patrocina a Toyota Motorsport, y el equipo Toyota Imperial South Africa consiguió una destacada segunda plaza global en coches en el Dakar de 2013, con una versión para competición del HiLux, pilotado por Giniel de Villiers y Dirk von Zitzewitz.

Como dice Glyn Hall, jefe de equipo de Toyota Motorsport: “Hay tres criterios para conseguir ganar una carrera: fiabilidad, velocidad y un buen piloto y copiloto. Por eso, todos los rodamientos que usamos en nuestros coches o son de SKF o son equipamiento original”.

Enlaces relacionados

The Dakar Rally

En 1977, el francés Thierry Sabine fue rescatado en el desierto libio tras haberse perdido durante un rally de motos. Transformado por su experiencia en ese paisaje árido, volvió a Francia y al año siguiente fundó el Rally Dakar. El recorrido de 10.000 kilómetros atrajo a 170 participantes profesionales y aficionados que compitieron en motocicletas y coches. En 1980 se añadió una categoría de camiones, y en 2009 la de quads.

Durante la mayor parte de su historia, esta carrera anual de resistencia salía de París, Francia, y finalizaba en Dakar, Senegal. Sin embargo, las amenazas de seguridad obligaron a cancelarla en 2008. Al año siguiente, la carrera se trasladó a América Latina, donde se ha organizado cada año desde entonces.

El Rally Dakar ha tenido sus altibajos a lo largo de los años, pero los corredores no han perdido ni un ápice de su motivación. Entre los ganadores destacan los motoristas Cyril Neveu, Edi Orioli y Cyril Despres, con cinco, cuatro y cinco victorias, respectivamente. El conductor de camión Vladimir Chagin ha sido el que más veces ha ganado (siete) en una categoría individual. En 2001, la alemana Jutta Kleinschmidt se convirtió en la primera mujer en ganar el Dakar, en la categoría de coches. Sin embargo, el participante más premiado es sin duda el francés Stéphane Peterhansel, que ha ganado seis veces en moto y cinco veces en coche. Su victoria más reciente fue en la última edición, en 2013.

Este año empezó en Lima, Perú, pasó por Tucumán, Argentina, y finalizó en Santiago, Chile. Participaron corredores de 53 países. Los que acabaron la carrera condujeron hasta 800 kilómetros al día durante 15 días, cruzando desiertos, montañas y ríos: una proeza única e inolvidable.

La perspectiva de un piloto
“Tuve dos minutos para pensármelo y dije que sí. Cuando colgué el teléfono, pensé: ‘¿En qué me he metido?’”.

Así es cómo recuerda Marco Reinike de la Vega, técnico comercial de SKF del norte de Chile, su decisión de participar en el Dakar 2012. “No tenía ni moto ni equipo ni logística y sólo tres meses para poner en marcha todo el proyecto”.

Para sorpresa de Reinike, gracias a los resultados asombrosos alcanzados en un par de carreras locales, consiguió la inscripción gratuita en el Rally Dakar.
Sólo dos de cada tres participantes en el Dakar –muchos de ellos profesionales– llegan a la línea de meta, y la edición de 2012 fue agotadora para Reinike. “Cuando acababa cada etapa, ponía a punto la moto para el día siguiente, me duchaba, comía y dormía”, recuerda. “Al día siguiente me levantaba a las 4 de la mañana. Durante 15 días, apenas dormía o comía. Pero acabé”.

El hecho de que consiguiera acabar la carrera le cualificó para volver a competir en 2013. Esta vez llegó más preparado, con más apoyo.

Pero le esperaban nuevos retos. “En cierto momento, iba a 140 kilómetros por hora en quinta marcha cuando falló el freno de atrás mientras entraba en una curva”, dice. “Choqué de lleno con la barrera. Pero no me hice daño, y una hora después ya tenía la moto reparada”. Reinike recalca que los componentes de SKF que llevaba su moto –como rodamientos, obturaciones para horquillas y grasa– funcionaron a la perfección.

Consiguió mejorar su resultado de 2012, acabando 79º de 196 participantes en la categoría de motos.

Tras unas semanas de descanso, Reinike ya está haciendo planes para la edición de 2014. “Correr es una adicción sana”, dice.